domingo, 15 de septiembre de 2013

"Vietnam"

El cafe, tus puchos con sabor a chocolate, Dostoyevski, Todo se alinea.
Hoy, no hay peros. Estabas ahí parado, con tu mochila de niño explorador, y lo mirabas absolutamente todo.
 No podía dejar de verte, vos parado como siempre, pensando, te sentía y no podía, ni quería resignarme a dejar de mirarte y de sentirte.
No puedo recordar si hablabas o no con alguno de tus alumnos cuando cruzaste, te sentía más cerca que nunca.
Te sentaste en el banco justo frente al mio, te cursaste de piernas y te prendiste un cigarrillo, tu mirada comenzó a divagar en los cientos de estudiantes que estaban esperando  que suene el timbre de la una y diez para poder entrar a clase.
Por más que lo intente no puedo eliminar tu imagen de mi cabeza, estabas ahí sentado, tenias puestos unos pantalones blancos y una remera que decía "Vietnam".
Te pusiste el cigarrillo en la boca y me miraste, creo que no tuviste la intención de mirarme a mi, simplemente mirabas, yo también te miraba, creí que mi corazón se detendría, no podía dejar de mirarte, por más que quisiera, por más que hiciera un esfuerzo inhumano por dejar de hacerlo, no podía.
Pero sonó el timbre, y yo, recordé, que claro, no podía.
Desde ese momento supe que, ya te amaba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario